¿Cómo pueden ponernos en riesgo las bolsas de aire?

Aunque las bolsas de aire están diseñadas para protegernos, también pueden presentar riesgos. La gran fuerza con la que se despliegan las bolsas de aire es el primer factor de riesgo potencial. Si bien su propósito es amortiguar el impacto durante las colisiones, la velocidad de despliegue a veces puede provocar lesiones, especialmente si el conductor o el pasajero están sentados demasiado cerca o en una posición incorrecta. El inflado forzado puede causar quemaduras, abrasiones o incluso fracturas, lo que complica las secuelas de un accidente.

El funcionamiento erróneo de bolsas de aire.

Estos dispositivos de seguridad se basan en sensores que detectan una desaceleración repentina, lo que generalmente indica una colisión. Sin embargo, esta dependencia de los sensores puede hacer que las bolsas de aire no se desplieguen cuando deberían o no. Por ejemplo, en las situaciones en las que no se produce una colisión real, como golpear un bache o un bordillo, pueden activar por error el despliegue de la bolsa de aire y causar lesiones innecesarias.

Bolsas de aire y niños.

Por otro lado, los niños y las personas de baja estatura corren un mayor riesgo por el despliegue de las bolsas de aire. Dado que las bolsas de aire están calibradas para adultos de tamaño promedio, pueden ejercer una fuerza excesiva sobre los de menor estatura y causar lesiones graves o incluso la muerte. La fuerza de despliegue puede provocar lesiones graves en la cabeza, el cuello o el pecho de los niños.

En el ámbito de la seguridad de los vehículos, es crucial reconocer que ninguna tecnología está exenta de complejidades. Las bolsas de aire, a pesar de su propósito bien intencionado, pueden introducir inadvertidamente una serie de riesgos.

En caso de que una bolsa de aire te haya causado lesiones en un momento en el que estas no debieron haber salido, o no salieron cuando realmente debían, es posible que consigas una compensación por los daños que las fallas de estas te hayan causado. Contacta a un abogado de lesiones personales para recibir la orientación que necesitas.